Los animales mencionados en la obra

El perro.

“Tocas en vano con esa manija, es a cabeza de perro en cobre, gastada, sin relieves: semejante a la cabeza de un feto canino en los museos naturales. Imaginas que el perro te sonríe y sueltas su contacto helado. La puerta cede al empuje levísimo, de tus dedos...”





No resultaría interesante señalar al perro como un animal simbólico en el texto sino fuera porque se nombra en el mismo párrafo tres veces, y porque además, es el que custodia la puerta (simbólicamente). Si analizamos el ejemplo notaremos que el perro es comparado a un feto (otro signo que tiene que ver con lo que se gesta en un vientre) y además parece que le sonríe como si le estuviese dando la bienvenida al personaje
.
El perro, la manija de la puerta, conduce a la casa de Aura. Este perro de bronce se sitúa en un lugar de transición entre dos espacios: el afuera, la ciudad, y el adentro, la casa. Es conocido que simbólicamente el perro cumple la función de mediador entre el mundo de los muertos y el de los vivos.

En muchas culturas y, sobre todo en la nuestra, la occidental, está relacionado con la muerte y actúa como guía de las ánimas, de los muertos. Anubis, Cerbero, son algunos de los nombres con los cuales se le reconoce. Este aspecto simbólico que relaciona al perro con un mundo de magia y esoterismo, es el que me interesa resaltar en esta propuesta de lectura. Porque, si recuerdan bien, Felpe Montero al franquear esta puerta, cuya custodia simbólica es un perro, a dejado a tras el mundo concreto del que proviene para penetrar al mundo de Aura, mundo mágico y abstracto.

Recordemos que toda transición, implica en cierta forma un cambio de estado, un dejar atrás un estado anterior para vislumbrar uno nuevo ya sea físico o de conciencia.


La coneja (saga).  


Más no es todo, la instancia narrativa, nos propone además una analogía entre Aura y la coneja Saga que refuerza las características simbólicas del animal y las traslada a la figura de Aura. cito el siguiente pasaje de la novela. Recordemos el paisaje donde Felipe Montero esta hablando por primera vez con la Señora Consuelo y repentinamente grita:



“- Saga. Saga. ¿dónde estás? Ici , Saga...-         ¿Quién?
-         Mi compañía.
-         ¿El conejo?
-         Sí, volverla.
 Y un poco más adelante en la narración después de que Felipe y Doña Consuelo discuten algunos puntos la vieja retoma el tema y dice:             “- Le dije que regresaría...-         ¿Quién?
-         Aura. Mi compañera. Mi sobrina...
Las liebres y los conejos están vinculados a la vieja divinidad Tierra Madre, al simbolismo de las aguas fecundantes y regeneradoras. También se dice que son lunares porque duermen de día y brincan de noche, porque saben, a semejanza de la luna, aparecer y desaparecer con el silencio y la eficacia de las sombras. El conejo que aparece en la obra es un ser de oscuridad y sombra que sólo se le ve cuando está con Doña Consuelo en la cama comiendo migajas.

            El conejo también es el principio de la renovación cíclica de la vida, gobierna en la tierra la continuidad de las especies vegetales, animales y humanas. Curiosa la asociación de este animal simbólico y ese deseo constante y sistematizado de conservación y renovación de la antigua vida de los personajes en la obra. Además, por si fuera poco, un dato más, el conejo, que en realidad es coneja, se llama Saga. Saga como sabemos implica una continuidad, un seguimiento de la historia de un clan, de una familia, de un hecho. Significativo este signo que se une al resto de los signos que convocan esta misma problemática de preservación y renovación del ser.


            Más no es todo, la instancia narrativa, nos propone además una analogía entre Aura y la coneja Saga que refuerza las características simbólicas del animal y las traslada a la figura de Aura. cito el siguiente pasaje de la novela. Recordemos el paisaje donde Felipe Montero esta hablando por primera vez con la Señora Consuelo y repentinamente grita:

 Además, en otro pasaje de la novela Aura es comparada a la luna, cuando Felipe Montero se refiera a sus muslos color de luna. Por otra parte, no se debe olvidar que los conejos siempre están ligados a las ideas abundantes, de exuberancia, multiplicación de los seres y de los bienes que llevan también en sí gérmenes de incontinencia, despilfarro, lujuria y desmesura. Y finalmente las liebres y los conejos son compañeros de Hécate, diosa que alimenta la juventud, pero frecuenta las encrucijadas y finalmente inventa la brujería.











Comentarios

Entradas más populares de este blog

¿Qué tiene de relación la brujería con Aura?

Breve explicación de Aura.

¿Qué significa aura?